A 10 años de su muerte Hugo Chávez mantiene popularidad

A pesar de la crisis venezolana chavismo sigue vivo

Diez años después de su muerte por cáncer a los 58, el líder mesiánico que conectó con millones de venezolanos pobres se ha convertido en un icono. Desde la tumba sigue siendo el líder mejor valorado de Venezuela. Ningún político vivo, ni chavista ni opositor, le hace aún sombra a su figura.

Nacido en 1954 en Sabanetas, en el estado de Barinas -en el oeste de Venezuela-, Hugo Rafael Chávez Frías era hijo de maestros rurales y tuvo una infancia “feliz” -según declaró- a pesar de crecer en condiciones humildes. Pronto se aficionó al beisbol, un deporte que le apasionaba y una de las razones que le llevó a alistarse en la Academia Militar, pues le permitía practicarlo.

En 1975 se graduó como subteniente y fue ascendiendo hasta alcanzar en 1991 el rango de teniente coronel. El 4 de febrero de 1992 protagonizó un golpe de Estado contra el entonces presidente de Venezuela Carlos Andrés Pérez, una intentona fallida por la que fue detenido y posteriormente expulsado del Ejército.

Chávez por encima de todo fue un líder amado por los suyos. El 5 de marzo de 2013, cuando un lloroso Nicolás Maduro anunció su muerte, miles de personas en todo el mundo pensaron que el chavismo no sobreviviría sin él. Era difícil ver en esa imagen de ministros desolados, considerados unos subalternos, la fuerza suficiente para mantenerse en el tiempo y vencer una y otra vez a una oposición siempre desnortada. Maduro, fontanero de la revolución del comandante y su mano derecha para solventar tropiezos, le sucedió porque así lo quiso Chávez. Y ahí sigue una década después.

Hugo de los Reyes Chávez, el padre del difunto presidente venezolano Hugo Chávez, visita la tumba de su hijo durante las conmemoraciones del décimo aniversario de su muerte.

El fundador de la llamada revolución bolivariana protagonizó un polémico mandato marcado por el apoyo popular y el autoritarismo, que tuvo continuidad con el actual presidente, Nicolás Maduro, al que señaló como sucesor.

El presidente Nicolás Maduro presidió este 5 de marzo un acto de conmemoración por el décimo aniversario de la muerte de Hugo Chávez, en el que pidió mantener la unión política, ideológica, moral y alejar cualquier “fuerza divisionista”.

“Siempre surgen fuerzas disolventes (…) que pretenden desdibujar el camino de la resistencia de la revolución, que pretenden aprovecharse de las dificultades (…) el pueblo les tiene que decir muy claramente, no a las fuerzas disolventes (…) y cuidar la unión política, la unión ideológica, la unión espiritual, la unión moral de nuestro pueblo”, señaló Maduro.

El oficialismo rindió más temprano otro homenaje a Hugo Chávez en el cuartel desde el que dirigió el golpe de Estado de 1992 contra el entonces presidente, Carlos Andrés Pérez.

Desde el Cuartel de la Montaña, lugar donde reposan los restos del líder bolivariano, familiares, líderes políticos nacionales y extranjeros homenajearon al Comandante Hugo Chávez, a diez años de su partida.

En el Cuartel de la Montaña, antiguo museo militar rebautizado como Cuatro de Febrero en honor a la fecha de 1992 en la que, desde sus instalaciones, Chávez dirigió el golpe de Estado, miembros del Gobierno y simpatizantes del hombre que rigió los destinos de Venezuela hasta 2013 recordaron su legado.

En ambos homenajes estuvieron presentes el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega; el de Bolivia, Luis Arce, y el primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves. Así como los expresidentes de Cuba, Raúl Castro; de Bolivia, Evo Morales; de Ecuador, Rafael Correa y de Honduras, Manuel Zalaya.

Asimismo, miles de simpatizantes del chavismo acudieron al Cuartel de la Montaña para honrar la memoria del mandatario.

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