AstraZeneca le devuelve la pelota al gobierno dominicano
Explica el retraso de sus vacunas
Por Jeannette Kranwinkel
La empresa farmacéutica AstraZeneca parece que no está dispuesta a complacer las exigencias del gobierno dominicano de cambiar las vacunas contra el Covid que no entregaron a tiempo, por otros medicamentos que precisa el sistema de salud nacional.
La multinacional ha rechazado la acusación de incumplimiento de los acuerdos contractuales con el Gobierno dominicano, señalando que por el contrario ha acogido de buen gusto varias solicitudes realizadas por las autoridades relativas a la cantidad de dosis a suplir y las fechas.
Ejecutivos de la firma explicaron que estuvieron listos para entregar las vacunas contra el Covide-19 contratadas por las autoridades dominicanas en 2020.
Sin embargo, admiten que las primeras dosis no se entregaron en marzo como se tenía estimado, pero explicaron que el segundo retraso se debió a que las autoridades sanitarias dominicanas no habían validado el laboratorio en Estados Unidos donde se produjeron esas dosis, como hicieron otras naciones latinoamericanas.
Explican que originalmente las dosis dominicanas se tenían contempladas ser elaboradas entre laboratorios de Argentina y Canadá.
Explican que posteriormente el Gobierno dominicano le pidió que la cantidad de vacunas se redujera a 5.8 millones en vez de los 10 millones de dosis contratadas originalmente, a lo cual accedieron.
Al hacer referencia a la flexibilidad mostrada frente a las autoridades, señalaron que también le fue requerido que la entrega fuera retrasada para 2022 .
La empresa señaló que está dispuesta a retrasar la entrega de las dosis para 2023, en virtud de que se tiene como un hecho que cada año se deberán realizar vacunaciones contra el Covid-19.
“Durante el proceso, AstraZeneca se ha comportado con integridad y decoro, demostrando buena fe y apertura para conciliar las solicitudes del Gobierno con nuestras obligaciones contractuales”, expresa.
La farmacéutica informó que también ofreció que parte de lo contratado sea suplir a República Dominicana su anticuerpo monoclonal para pacientes que pueden no desarrollar una respuesta inmunitaria adecuada a una vacuna COVID-19, y así puedan proteger a dominicanos que aún son vulnerables a pesar de la vacunación.
República Dominicana contrató vacunas suficientes para atender, primero dos dosis y luego la dosis de refuerzo, a los dominicanos, pero una gran cantidad decidió no vacunarse.