Biblioteca de la UASD se está cayendo a pedazos

La Biblioteca Pedro Mir de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) también se está cayendo a pedazos sin que la actuales autoridades encabezadas por el rector, Editrudis Beltrán se interesen por mejorar sus condiciones.

Lo que antes era un espacio utilizado por los estudiantes para consultas y concentrarse en los estudios, se encuentra en condiciones deplorables.

Falta de internet, computadoras dañadas, filtración en el techo, deterioro de baños, ascensores en mal estado caracterizan las condiciones de la Biblioteca Pedro Mir.

Las computadoras están casi completamente inoperantes y las pocas que funcionan no tienen acceso a internet, un problema que ha persistido según los estudiantes durante un largo período sin solución aparente.
Esto impide a los discentes llevar a cabo sus investigaciones y tareas en línea, intensificando el desafío académico que enfrentan.

En los dos primeros niveles se pudo apreciar una gran cantidad de estudiantes, unos durmiendo, otros dialogando y la gran mayoría realizando tareas desde sus propios dispositivos.

El rector de la UASD, Editrudis Beltrán, en cuya gestión la universidad ha experimentado un retroceso en diferentes aspectos, uno de ellos el abandono de la infraestructura.

Los techos de varios salones presentan filtraciones y los tomacorrientes carecen de electricidad, dejando a los estudiantes sin opción para cargar sus dispositivos. La ausencia de aire acondicionado en el nivel 3 y 4 es notable, convirtiendo el inmueble en un ambiente extremadamente incómodo para el estudio prolongado.

En el segundo nivel hay dos salones a la derecha e izquierda, ambos dotados de computadoras que no funcionan. El estado de los equipos en el tercer nivel es peor, ya que en el mismo no funciona ninguno de los que allí se encuentran.

El cuarto nivel es una de las áreas que se encuentra en peor estado, tanto así que hay un salón cerrado y se percibe en situaciones desmejoradas. Una gran parte del techo se visualiza descompuesto, solo hay unas cuantas mesas en malas condiciones, no tiene sillas, así como los cubículos se encuentran sin ningún equipo tecnológico, el piso con agua aparentemente por filtración. Es el nivel al cual asisten pocos usuarios por el estado en que está la edificación.

La Biblioteca Pedro Mir fue inaugurada por el presidente Fernández en noviembre del 2005 y su remodelación costó 250 millones de pesos. Fue también equipada con un monto de 20 millones de dólares.

Botón volver arriba