Biden en campaña lanza plan a favor inmigrantes
En medio de la campaña electoral y con miras a ganarse el favor de los inmigrantes, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, anunció este martes un plan para regularizar a cerca de medio millón de -indocumentados que estén casados con ciudadanos estadounidenses y a unos 50,000 de sus hijos menores de 21 años que comparten estatus migratorio irregular.
De acuerdo con la Casa Blanca, la medida anunciada por el demócrata garantizará que “los ciudadanos estadounidenses con cónyuges e hijos no ciudadanos puedan mantener unidas a sus familias”, ya que les permitirá solicitar la residencia permanente legal sin salir del país.
Sin embargo, los migrantes deberán cumplir con ciertas condiciones para poder ser elegibles para este nuevo plan, que llega a menos de cinco meses de unas elecciones presidenciales en las que la gestión de la migración se ha convertido en un tema central para los estadounidenses.
Los indocumentados que quieran acceder a esta facilidad, tienen que haberse casado con un ciudadano estadounidense antes del 17 de junio de 2024 y haber vivido en el país al menos 10 años.
La Casa Blanca subraya en el comunicado publicado hoy que los elegibles para este proceso han residido en territorio estadounidense durante 23 años.
A su vez, los hijos menores de 21 años de quienes están casados con estadounidenses y que tampoco tengan un estatus legal también pueden obtener el permiso.
Los migrantes que hayan sido deportados de EE.UU. en el pasado no califican para esta protección.
Aquellos migrantes que sean aprobados después de sortear una evaluación caso por caso de su solicitud por parte del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) tendrán un período de tres años para solicitar la residencia permanente.
Podrán permanecer con sus familias en los Estados Unidos y serán elegibles para una autorización de trabajo por hasta tres años.
Estas políticas tardarán meses en entrar en vigor y concederán a los migrantes la oportunidad de dar solo el primer paso en el proceso para conseguir permiso de residencia en EE.UU., que puede prolongarse años.
El programa se apoya en una figura legal conocida como “parole”, que otorga a quienes ya están en territorio estadounidense protección frente a la deportación y les posibilita aplicar a un permiso de trabajo.
Con este permiso los migrantes que entraron al país de manera irregular y están casados con ciudadanos estadounidenses pueden solicitar la residencia y, eventualmente, la ciudadanía.