Dajabón abandonado y su alcalde persiguiendo haitianos

El alcalde de Dajabón ha decidido usurpar las responsabilidades de Migración, al amenazar con sacar «hasta debajo de la cama» a los haitianos que viven en esa ciudad fronteriza, amenazando de paso a los propietarios de viviendas de incautarlas si las alquilan a esos inmigrantes.
Santiago Riverón hizo los pronunciamientos al iniciar un operativo contra los haitianos indocumentados, en un Dajabón que vive del intercambio comercial con esos inmigrantes que pasan a diario y especialmente cuando hay mercado binacional, dos días a la semana.
El alcalde ha salido en busca de los haitianos, cuando Dajabón tiene múltiples problemas a las que debe darle respuesta el cabildo, a los que no ha dedicado la energía con la que ha salido a recoger a los vecinos.
En su recorrido por barrios con presencia haitiana, Riverón exigió a los extranjeros abandonar el municipio en un plazo máximo de cinco días.
La acción se desplegó en los barrios Hoyo de Lima, Hoyo del Puerco y La Mara, zonas que, según Riverón, concentran una alta presencia de inmigrantes haitianos sin documentación legal. En un tono enérgico, el alcalde advirtió que, de no cumplirse el plazo, se procederá a solicitar el respaldo de la Dirección General de Migración (DGM) y del Ejército Dominicano para ejecutar procesos de repatriación.
“Todos los extranjeros que residan ilegalmente en estos sectores tienen cinco días para salir voluntariamente del municipio. Volveremos con Migración y el Ejército. Si estas instituciones no nos acompañan, de cualquier manera los sacaremos. Pero se irán”, declaró Riverón.
Además, el funcionario advirtió a los propietarios dominicanos que arriendan viviendas a migrantes en condición irregular que se exponen a sanciones legales, incluyendo multas y posible incautación del inmueble.
Riverón justificó la medida señalando que la presencia de personas indocumentadas en estos sectores ha generado conflictos y problemas de convivencia. “Se ha convertido en un dolor de cabeza para los dominicanos que viven en estos lugares”, expresó.
La medida ha generado preocupación entre organizaciones defensoras de derechos humanos y sectores que abogan por un manejo humanitario del tema migratorio en la zona fronteriza. No obstante, desde la Alcaldía se insiste en que la acción busca “restablecer el orden” y “garantizar la seguridad” de los ciudadanos del municipio.