Desde el gobierno están interviniendo teléfonos privados

La práctica del espionaje desde el gobierno contra ciudadanos fue denunciada por el destacado jurista de Santiago, Ramón Antonio -Negro- Veras, quien dijo que hay funcionarios dedicados a «marranerías» convirtiendo al país en un «nido de víboras».

En una declaración escrita, Negro Veras cuestiona que esto esté sucediendo en un gobierno encabezado por el presidente Luis Abinader, de quien dijo, tiene una buena formación familiar.

«Sin darse cuenta la ciudadanía está pasando por tontos, al creer que desde el gobierno todo se hace con pulcritud, cuando la verdad es que desde su interior hay funcionarios que ejecutan suciedad y marranerías» se quejó el prestante abogado santiagués.

Criticó que en el seno del gobierno actual haya personas de baja estofa, con condiciones de mando, que ponen en ejecución diabluras contra la ciudadana o el ciudadano de espíritu celeste.

“La gente de este país debe poner los pies sobre la tierra, y dejar de estar viviendo de ilusiones, suponiendo que está  en un paraíso, y no en  un nido de víboras”, sostuvo el profesional del derecho.

Negro Veras dijo que hay que estar conscientes de que a la persona más honorable, sobrada de honor y mucha respetabilidad, en un abrir y cerrar de ojos, desde el poder del Estado, la convierten en indigna y despreciable.

Lamenta que la mujer o el hombre de bien, estén para permanecer horrorizado, porque no saben en qué momento, mediante mecanismos de alta tecnología, le van a preparar un expediente infame.

Dijo que el ciudadano dominicano más ingenuo, en un santiamén, recibe desde  su proveedora  de servicios de comunicaciones, la información de que su equipo celular está siendo espiado desde el gobierno.

Asimismo, se pregunta qué garantía tiene la ciudadana o el ciudadano de que su vida privada está legalmente protegida, si desde el mismo gobierno es dañada, y de cualquier manera vulnerada.

“Es el propio gobierno actual el que se está ocupando de contravenir, de no honrar la Constitución y las leyes que se suponen garantía de los ciudadanos. En lugar de acatar se convierte en infractor. Cómo vivir tranquila una sociedad humana si desde el Estado la motivan a estar en estado de desasosiego, alborotada, turbada, muy excitada. No hay forma de lograr la calma”, puntualiza.

Dijo que el hecho del gobierno intervenir el celular de una persona buena, es entrometerse, inmiscuirse para dañarla; meterse a los fines de crearle perturbación, absoluta perplejidad.

Indica que resulta insoportable continuar como hasta ahora, cuando el ente social honrado y respetuoso es víctima de organismos del gobierno central y tratado con métodos propios de regímenes indecentes.