Dolor e indignación sepelio niño muerto por policía Santiago

Una verdadera expresión de dolor e indignación se ha vivido en la ciudad de Santiago en el sepelio del niño Donaly Martínez, asesinado de varios disparos por un agente policial, integrante de una unidad élite que protagonizó un incidente con el padre del menor por el volumen de la música de una bocina cuando se celebraba el desfile del carnaval en esa ciudad.

Cientos de personas acompañaron el cortejo fúnebre hacia el cementerio El Ingenio, donde fueron sepultados los restos del pequeño, un estudiante meritorio que cae como parte de los excesos de la Policía Nacional en Santiago, donde han ocurrido otros hechos lamentables con ciudadanos inocentes.

Consignas como  “Policía, no me mates”, colocadas en enormes bocinas, y decenas de personas en motocicletas acompañaron al niño hasta su última morada.

Comunitarios y vecinos con lágrimas esperan fuera de sus hogares y en toda la calle los restos de Donaly Martínez, haciendo un acto de unión al dolor que embarga a la familia.

Desde los más pequeños hasta los más ancianos se han solidarizado con la triste situación por la que atraviesan estas personas.

La noche del lunes, mientras se encontraba el ataúd expuesto en su residencia en Cienfuegos, Santiago se lanzó a las calles a protestar por justicia para el niño.

Tanto en la Avenida Las Carreras como en Santiago Oeste marcharon y encendieron velas como forma de expresar la indignación que sienten ante este hecho.

La vida del adolescente de 11 años fue arrebata por un agente de la Policía de Acción Rápida, en medio de un incidente por el alto volumen de una bocina en momentos en los que se realizaba el carnaval de esta ciudad.

Por el asesinato del niño solo ha salido a la luz pública el agente que hizo los disparos, pero en ningún momento se ha mencionado a los oficiales que debieron estar supervisando los servicios y el director regional de la policía en Santiago no se ha dejado ver.

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