El Congreso le da oxígeno desacreditados miembros Cámara de Cuentas
La desacreditada Cámara de Cuentas y los miembros de su pleno, a quienes se les recomendó un juicio político por los escándalos protagonizados en los últimos meses, seguirán recibiendo el oxígeno de un Congreso Nacional que no se pone de acuerdo a la hora de sancionar las irregularidades en organismos públicos.
La politiquería se ha puesto de manifiesto en este delicado caso, quedando engavetada la resolución de una comisión especial de la Cámara de Diputados que pedía someter a interpelación al pleno de la Cámara, encabezado por Janel Ramírez, la cabeza de los escándalos.
Este miércoles termina la legislatura ordinaria y entre los proyectos que seguirán durmiendo en las gavetas de la cámara baja figura el del organismo fiscalizador.
El diputado Rogelio Alfonso Genao, presidente de la comisión que recomendó el juicio político, explicó que, aunque el proyecto no perima, seguirá congelado en el Congreso porque está propenso a derrumbarse si se somete a votación en la Cámara de Diputados.
Genao consideró que, aunque no caduque, no se presentará en el hemiciclo para su debate porque “no existen los votos ni la mayoría necesaria” para aprobar la medida contra los funcionarios de la Cámara de Cuentas por supuestamente cometer faltas graves en sus funciones.
Se refiere el legislador reformista, a la mayoría especial de 127 votos que necesitan proyectos como los juicios políticos para ser aprobados en la Cámara Baja. El Partido Revolucionario Moderno (PRM) no tiene los votos necesarios y, por lo tanto, necesita el respaldo obligatorio de los opositores.
En ese sentido, Genao dijo que “el juego está trancado” porque el liderazgo del Congreso Nacional no someterá el informe a votación por el rechazo de los opositores.
“Más de la mitad del Congreso está de acuerdo con un juicio político, pero no se tienen los votos de las dos terceras partes, entonces como que se ha tomado la decisión de no someter el informe”, sostuvo el legislador al referirse al documento acusatorio contra los titulares de la Cámara de Cuentas que los señala por alterar actas, esconder auditorías y usurpar funciones.
El engavetado proyecto que buscar aplicar un juicio político persigue que Janel Ramírez, Elsa Catano, Tomasina Tolentino, Elsa Peña y Mario Fernández respondan ante el Senado por cometer faltas graves en sus funciones y por la falta de armonía que han impulsado en la Cámara de Cuentas, según un informe de los diputados.