Emergencia no resolvió daños Fiona en Región Este
Familias siguen esperando ayuda prometida
Los anuncios de masivas ayudas en materiales y otros insumos para los damnificados del huracán Fiona en la Región Este del país se quedaron en el aire para muchas comunidades donde todavía esperan la asistencia oficial, cuando toca a su fin la emergencia declarada por el gobierno por el desastre provocado por las lluvias.
En poblaciones orientales todavía quedan muchas viviendas por techar, caminos obstruidos y puentes en el suelo afectando las actividades productivas de sus residentes.
Tan pronto pasó Fiona, que entró por la provincia La Altagracia, el gobierno hizo una serie de anuncios tras reuniones en el Palacio Nacional y parafernalias visitas a las comunidades devastadas.
Pero como dice el refrán, del dicho al hecho, hay un gran trecho. Todavía en Higüey, El Seibo, Hato Mayor y municipios de esas provincias, hay familias sumergidas en las precariedades que agudizaron las inundaciones de Fiona.
En el caso de El Seibo, la provincia más afectada por el fenómeno, hay viviendas en el suelo como la de Sobeida Mejía en Las Yayas de Caciquillo que no se le ha clavado una madera, ni colocado un zinc.
Al igual que ellas, muchas familias viven el drama de quedar sin techo, otros han tenido que costearse las reparaciones y una cantidad está a la espera de que el gobierno cumpla con la promesa de que no quedaría una vivienda sin reparar
En tres ocasiones el presidente Luis Abinader visitó El Seibo en medio de la declaratoria de emergencia, en la que las comunidades se convirtieron en una especie de vitrina por donde se exhibieron altos funcionarios del gobierno que decían encabezar operativos.
Los productores agropecuarios que vieron destruir sus cultivos, tampoco han recibido la asistencia prometida, en especial los cacaotaleros de El Seibo..
Los reclamos se sienten con mayor fuerza en las zona rural, que en el caso de El Cuey, donde estuvo en su más reciente te visita el Jefe de Estado, se esperan los caminos vecinales, pues tes que se dañaron, asistencia a los agricultores y fincas, que no acaban de llegar.
En adición los efectos de Fiona, sin resolver han encontrado trato la ciudad con más quejas de parte de INAPA, en el suministro del vital líquido, aumento de tarifas y apagones de la Ede-Este y falta de iluminación en algunos barrios de la ciudad.