En cárcel Las Parras, el color es lo único que ha cambiado

Los trabajos en la nueva cárcel de Las Parras, para alojar a los miles de presos hacinados en la Penitenciaría de La Victoria, avanzan y se notan cambios, al menos en el color de la pintura.
Los pabellones intervenidos ya no tienen el color azul original, se pintaron de amarillo y las autoridades aseguran que el penal abandonado por motivaciones políticas llevadas a los tribunales, estaría listo a mediados de este 2025.
El Ministerio de la Vivienda y Edificaciones (Mived) está a cargo de los trabajos.
En esta fase inicial del proyecto, al menos 2,500 privados de libertad serán trasladados desde la Penitenciaría Nacional de La Victoria hasta este nuevo centro, donde se trabaja en la infraestructura para la administración y el albergue de los reclusos.
Se están habilitando accesos a la edificación, mientras brigadas del Mived acondicionan lo que parecen ser estaciones de electricidad en las áreas exteriores. Sin embargo, el terreno de las afuera luce en mal estado, algo intransitable, con algunas malezas y una combinación de polvo y lodo.
La estructura que soporta el letrero de la edificación aún conserva su antigua pintura azul desgastada por el paso del tiempo, mientras que las letras lucen con pintada a medias con colores gris y blanco.
Además, un agente de seguridad restringe celosamente el acceso al proyecto e impide la toma de fotografías o videos sin autorización del Mived o la Dirección General de Prisiones.
Hasta diciembre de 2024, las obras realizadas en el CCR Las Parras incluían la construcción de aulas educativas, talleres de costura, áreas de visitas infantiles, calles de acceso y un edificio de acceso alterno.
Asimismo, se han adecuado celdas, mejorado el sistema de electrificación y construido un desarenador para la planta de tratamiento de aguas residuales.