Era empleado del banco autor tiroteo en Kentucky
Era un joven empleado del mismo banco, el autor el tiroteo que dejó un saldo de cinco muertos y heridos en Louisville, Kentucky.
Según la policía, el joven de 23 años, Conner Sturgeon, utilizó un rifle para disparar contra los presentes en la institución bancaria
El agresor, que fue “neutralizado” por los agentes y también falleció, era un hombre blanco.
El tiroteo se produjo sobre las 08.30 hora local de la mañana (12.30 GMT) en un edificio del centro de Louisville donde se ubica una de las sedes del Old National Bank, un banco regional con sucursales en el sureste y medio oeste de Estados Unidos.
Cuatro personas fallecieron y otras nueve resultaron heridas, tres de ellas en estado crítico. Las cuatro víctimas mortales, tres hombres y una mujer, tenían entre 40 y 67 años.
Aparte se contabiliza la muerte del agresor, que falleció dentro del banco en el intercambio de disparos con los agentes. “La primera batalla era frenar al agresor. La segunda es hacer todo lo que podamos para mantener vivos a los heridos”, dijo en una conferencia de prensa el gobernador de Kentucky, Andy Beshear, amigo de uno de los fallecidos.
El edificio donde se produjo el tiroteo se encuentra junto a Slugger Field, el campo de béisbol del equipo local, los Louisville Bats, una de las zonas más concurridas de esta ciudad situada en la frontera de Kentucky con Indiana y en la que viven cerca de 630,000 personas.
Según Gun Violence Archive (GVA), un proyecto sin ánimo de lucro que sigue la violencia armada en Estados Unidos, en lo que va de 2023 se han registrado 10,566 incidentes con armas de fuego, entre lo que se incluyen desde tiroteos masivos hasta suicidios. GVA define como tiroteo masivo aquel que acaba con cuatro víctimas, sean muertos o heridos, sin incluir al autor del ataque si es que ha fallecido o sufrido lesiones durante el suceso.
El presidente estadounidense Joe Biden, en cuya gestión se han disparado estas masacres, arremetió contra los republicanos del Congreso y les reprochó que no hayan reformado las leyes que regulan la posesión de armas de fuego para evitar tiroteos como el que se produjo en Louisville.