Federación Distritos Municipales trata justificar deforestación

Al director ejecutivo de la Federación Dominicana de Distritos Municipales, Pedro Richardson hay que explicarle la diferencia entre solicitar una cosa y que se lo autoricen.

El funcionario del organismo municipal ha tratado de justificar la tala masiva de árboles, en su mayoría caobas, realizada por el  encargado del distrito municipal de Villa Linda, en el área protegida de Pantoja.

Richardson argumenta que ese cabildo  solicitó permiso a Medio Ambiente para la tala de los árboles para dar paso a lo que ellos consideran una “circunvalación” que beneficiaría a los residentes en esa zona.

Así quedó el área protegida deforestada por el encargado de la Junta Distrital de Palmarejo sometido a la justicia por Medio Ambiente.

El director ejecutivo de FEDODIM, lo que no dice es que Medio Ambiente no le había extendido la autorización para que arrasara con una amplia área verde.

Después Richardson admite que los alcaldes de Pantoja y Palmarejo debieron esperar que el organismo oficial le diera el permiso, aunque entiende que debe otorgárselo, alegando que ese es un espacio público, como si estos estuvieran exentos de las regulaciones medio ambientales.

También se canta y se llora al señalar que en el marco de la Ley 176, no es función de los gobiernos locales hacer carreteras, sino que son una atribución del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).

Destacó además, que a FEDODIM, nadie puede darles cátedra en materia de protección medioambiental, porque ese es elemento nodal de la visión de esa Federación.

El Ministerio de Medio Ambiente informó el sometimiento a la justicia de José (Richard) Valdez Mora, director municipal de Palmarejo Villa Linda, señalado por la tala de decenas de árboles, ubicados en el kilómetro 17 de la autopista Duarte, el pasado viernes.

El anuncio fue realizado en rueda de prensa por el ministro de Medio Ambiente, Orlando Jorge Mera, quien indicó que la entidad solicitará prisión preventiva contra Valdez Mora, señalado por “el crimen ambiental de impactar en una superficie de unos 17,000 metros cuadrados, afectando 3,200 metros cuadrados de bosque con el desmonte de cientos de especies nativas”.

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