Forbes dice yate Flying Fox, que está en RD es de oligarca ruso
El lujoso yate Flying Fox, cuya renta semanal tiene un costo de 3.5 millones de dólares, y que se encuentra desde este lunes en República Dominicana, fue citado por la revista Forbes como uno de los yates pertenecientes a oligarcas rusos en los que el Gobierno de Estados Unidos y naciones europeas tienen los ojos puestos para ser confiscados.
Se recuerda que en la tarde de ayer una fuente de Autoridad Portuaria dijo a Diario Libre que la embarcación está ocupada por extranjeros, de acuerdo con lo informado a la referida entidad por la administración del puerto Don Diego, donde atracó el yate.
La revista Forbes, especializada en negocios y finanzas, señala en un artículo, en el que menciona 37 yates, que la opulenta embarcación sería propiedad del empresario ruso Dmitri Kamenshchik, presidente y accionista único del aeropuerto de Moscú Domodevodo, uno de los más grandes de Europa del Este.
Agrega que el yate, que cuenta con una longitud de 446 pies y está valorado en 455 millones de dólares, fue registrado en las Islas Caimán y su última ubicación es Santo Domingo, República Dominicana. Añade que embarcaciones como el Flying Fox están registradas como vehículos “offshore”, “y atracados en lugares remotos”.
La revista señala que, de acuerdo a la empresa de datos marítimos VesselsValue,”la propiedad de los yates es notoriamente privada”. La firma añadió que usualmente las embarcaciones son propiedad de compañías offshore “registradas en todas partes, desde la Isla de Man hasta las Islas Caimán”.
Forbes recordó que los multimillonarios rusos han estado en la mira de varias naciones, desde que el presidente Vladimir Putin ordenó una inserción militar en Ucrania. En ese sentido, previamente el gobernante estadounidense Joe Biden manifestó que trabajaría con países europeos para atacar a los oligarcas, incautando sus yates, jets y apartamentos de lujo.
De acuerdo a Forbes, Dmitry Kamenshchik tiene un patrimonio neto de 1.9 mil millones dólares. Sus inicios en el transporte aéreo se remontan al 1992, cuando alquiló un avión para el transporte de mercancías de China a Moscú cuando era estudiante de Filosofía.