Gobierno busca sacudirse de torpe manejo migración en Friusa
Fue un «operativo sorpresa», en el que participaron más agentes migratorios, militares y policías, que los indocumentados haitianos apresados este viernes en Friusa y Mata Mosquito, los dos sectores de Bávaro atestados de esos inmigrantes que están en foco de la opinión pública luego de que grupos de «nacionalistas» realizaran una protesta que fue torpemente enfrentada por el gobierno.
La Dirección de Migración «se tiró» y luego de varias horas, apenas apresó a unos 150 inmigrantes haitianos ilegales.
Se ha calificado este operativo como «un bulto» de las autoridades, ante la presión de ciudadana por las desbordada inmigración de haitianos, lo que ha provocado un desplome de la popularidad del presidente Luis Abinader blanco de las más ácidas críticas en los últimos meses por ese tema.
El despliegue estuvo encabezado por el director general de Migración, vicealmirante Lee Ballester, en coordinación con el Ejército Nacional, la Policía Nacional y miembros del cuerpo élite CIUTRAN, sumando más de 100 agentes en el operativo.
Los detenidos para fines de deportación, no aportaron documentos válidos que acrediten su estatus legal en el país.
La jornada se focalizó en zonas identificadas como de alta concentración de inmigrantes ilegales, como Mata Mosquito, El Hoyo de Friusa, Villa Playwood, Kosovo y Haití Chiquito.
En estos sectores, los equipos de Migración y seguridad realizaron intervenciones focalizadas, apoyadas en labores de inteligencia y vigilancia previa, lo que permitió una mayor eficacia en la localización de extranjeros en situación irregular.
El operativo también marca un punto de quiebre en el control estatal de sectores como Mata Mosquito, históricamente señalados como de difícil acceso para las autoridades por su densidad poblacional, falta de urbanismo y reputación de inseguridad.
Precisamente se había denunciado la desidia de las autoridades para intervenir ese sector
Las autoridades han señalado que estos operativos continuarán en las próximas semanas como parte de una estrategia sostenida para garantizar el cumplimiento de las leyes migratorias, al tiempo que se refuerza la seguridad en zonas de alta vulnerabilidad.
Desde el Gobierno se ha reiterado que estas acciones no solo responden a una política de control fronterizo, sino también a la necesidad de preservar el orden público y proteger el mercado laboral local.