Juez Alejandro Vargas denuncia presiones escoger nuevos miembros TC
El juez del Tribunal Constitucional, José Alejandro Vargas denunció las presiones de grupos económicos para controlar esa alta corte y dijo que magistrados de tribunales son presionados en el país y Estados Unidos que amenaza con suspenderle el visado.
Advirtió que no se prestará para que se impongan agendas antinacionales en el Tribunal Constitucional, como temen jueces que abandonan el organismo y dijo que si quieren que le quiten la visa desde ahora.
Vargas criticó y calificó este lunes de ilegitimo que se haya formulado una «presión económica» en contra del Consejo Nacional de la Magistratura, para escoger los jueces del Tribunal Constitucional.
Al hablar en la puesta en circulación de obras de Tribunal Constitucional, Vargas dijo que tampoco es legítimo que la población no entienda cuáles son las presiones que los jueces ordinarios reciben cotidianamente al tomar una decisión.
«Cuando no los castiga la sociedad, entonces el poder extranjero les quita la visa. Y yo me pregunto: ¿Cuál es la moral? ¿A quién le conviene más la estabilidad institucional democrática de la nación, a los pobres o a los que más tienen?», cuestionó Vargas, al referirse a las supuestas presiones a las que se enfrentan los jueces.
Siguió diciendo que cuando se arma, una guerra, entre los pobres se tiran piedras, pero los poderosos económicamente se tiran misiles, por lo entiende que es importante que en el país haya un Estado de derecho que quienes más tienen que garantizarlo, son aquellos que tienen más que perder.
«Yo no puedo dejar pasar esta circunstancia para hacerle un llamado a los que más tienen, para que defiendan la democracia. Que no traten de imponer criterios», sugirió el togado.
Añadió que algunos de los jueces que dejarán el TC, le han externado su preocupación de que el organismo pueda ser afectado por intereses particulares.
Subrayó que «todo el mundo sabe que eso es posible, pero yo puedo asegurarles a ustedes, que yo no me prestaré nunca a apoyar ningún interés particular».
Dijo que su labor en el TC ha sido pacífica, porque hasta ahora no ha visto ningún sesgo particular que trate de contaminar las decisiones del organismo, pero que si eso llegase a pasar, sus colegas le verán las garras.