Locura en Argentina en recorrido de Messi y selección
Trofeo del Mundial llega a Buenos Aires
La Copa del Mundo llegó a Buenos Aires la madrugada de este martes.
Los miembros del equipo, liderados por su capitán, Lionel Messi, eran todo sonrisas el martes al bajar de su avión en Ezeiza, a las afueras de la capital argentina, y caminar por una alfombra roja desplegada para ellos.
Messi fue el primer jugador en salir del avión con el trofeo del Mundial poco antes de las 3 de la madrugada, acompañado del técnico Lionel Scaloni, que rodeó al capitán con el brazo mientras pasaban junto a un cartel con el mensaje “Gracias, campeones”.
El equipo fue recibido por la banda de rock La Mosca, que interpretó “Muchachos”, una canción escrita por un aficionado con la música de un viejo tema del grupo y que se convirtió en el himno extraoficial de los hinchas argentinos en el torneo de Qatar.
Los recién coronados campeones del mundo subieron a un autobús descubierto y se vio a varios de ellos, incluido Messi, cantando “Muchachos” mientras esperaban a que todo el mundo subiera a bordo para dirigirse a la sede de la Asociación del Fútbol Argentino.
El autobús avanzó a paso de tortuga mientras los hinchas, muchos de ellos ondeando banderas albicelestes, rodeaban el bus en una autopista deseosos de ver a los jugadores, y las fuerzas de seguridad trataban de controlar a la multitud.
Durante el recorrido, Messi sostuvo el trofeo mientras los jugadores saludaban a los hinchas y a menudo cantaban con ellos.
El bus tardó en torno a una hora en recorrer unos 11 kilómetros (6,8 millas) desde el aeropuerto a la sede de la AFA, donde fue recibido con fuegos artificiales.
Los jugadores dormirían unas horas en la sede de la AFA antes de volver al autobús más tarde el martes en dirección al Obelisco, el emblemático monumento de Buenos Aires que se vio rodeado por un mar de gente el domingo por la tarde después de que el combinado ganara el tercer Mundial de Argentina, y el primero desde 1986.
El presidente, Alberto Fernández, declaró un feriado nacional el martes para que el país pudiera celebrar la victoria.
Al día siguiente de que las calles de Argentina se convirtieran en escenario de fiestas multitudinarias tras la victoria del domingo, muchos seguían de cerca el vuelo que llevó de vuelta a casa a los jugadores. Mientras el vuelo se acercaba a Argentina, casi 200.000 personas seguían su ruta por internet y los canales de noticias cubrían en vivo su llegada.