Muere a los 94 años el empresario Mohamed Al-Fayed
Padre de Dodi Al-Fayed quien murió en accidente con la princesa Diana

El multimillonario empresario egipcio Mohamed Al-Fayed falleció el pasado miércoles, 30 de agosto, según ha informado 48 horas más tarde en un comunicado su familia. “Disfrutó de un largo y pleno retiro junto a sus seres queridos. La familia pide que se respete en estos momentos su privacidad”, dice el texto. Al-Fayed, fallecido a los 94 años, se retiró de la vida pública en la última década, y vivía en su mansión de Surrey (Reino Unido) junto a su esposa finlandesa, Heini.
El empresario, propietario durante un cuarto de siglo de los legendarios grandes almacenes londinenses Harrods, así como del club de fútbol Fulham F.C., fue un protagonista destacado de la vida económica y política británica y vio cómo su hijo, Dodi, ocupaba la primera plana de los diarios tabloides sensacionalistas a consecuencia de su romance con Diana Spencer, Lady Di, por entonces ya divorciada de Carlos de Inglaterra. Ambos fallecieron en un accidente automovilístico en París, el 31 de agosto de 1997, durante una persecución en la que huían de los paparazis por las calles de la capital francesa.

La muerte de su hijo, y de la propia Diana, dejó devastado a Mohamed Al-Fayed, que comenzó a alimentar teorías de la conspiración para explicar el accidente, y culpó de lo sucedido a la casa real británica —en concreto, a Felipe de Edimburgo—, a los servicios secretos británicos y franceses e incluso a la CIA estadounidense.
Nacido en Alejandría en enero de 1929, hijo de un profesor de escuela, en 1954 se casó con Samira Khashoggi, la hermana del traficante saudí de armas Adnan Khashoggi, fallecido en junio de 2017. Fruto de ese matrimonio, que apenas duró dos años, fue Mohamed Abdel Mena Fayed, más conocido por su diminutivo de Dodi.
Durante unos años el empresario puso en marcha una empresa de transporte marítimo, pero el verdadero poder y la relevancia los comenzó a alcanzar en la década de los sesenta, cuando se convirtió en asesor personal de uno de los hombres más ricos del mundo, el sultán de Brunéi. En la década de los setenta, Al Fayed se trasladó a Inglaterra (el “Al” de su apellido, cuenta la leyenda, lo incorporó en ese país para dar más rango a su nombre) y ya nunca se movió de allí. Acogido por su dinero pero nunca aceptado del todo por el establishment del Reino Unido, hasta en dos ocasiones —en 1994 y en 1999— le fue denegada la nacionalidad británica.
Además de hacerse con la propiedad de los almacenes Harrods en 1985, en ese mismo año compró el hotel Ritz de París, la villa parisina donde vivieron durante años exilio los duques de Windsor (el rey Eduardo VIII, que abdicó en favor de su hermano Jorge VI, y su esposa, la estadounidense divorciada Wallis Simpson), que estaba en un serio estado de abandono, y una finca en Escocia de más de 26.000 hectáreas. Ese año, además, se casó con la actriz y modelo finlandesa Heini Wathen, con la que llegó a tener cuatro hijos.
En noviembre de 2022, la revista Forbes calculó la fortuna de Al-Fayed en unos 2.200 millones de euros.