Otro sacerdote que se rebela contra obispos

2El controversial párroco de la iglesia de Cristo Rey, José Luis Hernández ha criticado la tibieza de los obispos en su Carta Partoral porque según afirma, no tocaron los problemas más acuciantes que padece la población,  en un país donde las cosas “andan bastante mal”.

“Estoy tratando de decir que la carta no está tocando los problemas cruciales de la sociedad. Este país anda bastante mal, ya hace tiempo que nada mal, aquí hay un problema de hambre, de seguridad…”, expresó Hernández.

El sacerdote católico lamenta que esta carta tenga más de una década que se ha ido apartando de lo que es el verdadero sentido de la gente y que resulta ser «simpática para la oposición, la gente del gobierno, gente liberales y conservadores», sin tocar ningún tipo de responsabilidad de los sectores sociales.

Asimismo, criticó la justicia dominicana al considerar que a “los grandes y ricos que lo cogen preso a los pocos días están en su casa, con media de coerción o prisión domiciliaria, mientras que los pobres están en La Victoria o  Najayo muriendo o pagando para estar en un lugar cómodo”.

Entiende Hernández que la iglesia debería de prestar más la atención en los temas que la gente está esperando que toque, como la responsabilidad de los funcionarios, el tema de la corrupción o mayor atención a un población desvalida que no tiene posibilidades. “Todo esto está ocurriendo en un país donde todo el mundo es irresponsable, no asume con carácter las responsabilidades”, agregó.

“Lo que está ocurriendo es que no lo pueden hacer los obispos, porque ellos están entre la gente, no huelen a ovejas, no huelen la materia fecal en las calles y callejones, porque andan en otro nivel. Tú nunca lo vas a ver caminando por un barrio o venir a la parroquia mía y salir a caminar por un sector, no lo hacen y si no lo hacen no pueden enterarse de lo que está ocurriendo, quizás si leen los periódicos, yo pienso que muchos no lo leen”, precisó.

El párroco de la iglesia de Cristo Rey dijo que los temas que los obispos y arzobispos están proponiendo es recurrente y no hay nada nuevo, “ahí no hay nada que ponga a pensar en los problemas de la gente, sobre todo la clase política”.

“Esa es mi opinión que pudiera traer consecuencias para mí, pero yo la asumo, yo tengo responsabilidad, yo tengo datos para responder “, precisó.