Papa critica a los empresarios mercenarios

El papa Francisco ha salido en defensa del trabajo de las mujeres embarazadas, ante la creciente decisión de los empresarios de despedirlas cuando van a tener hijos y alertó sobre los “empresarios mercenarios”, en una actividad en la que también abogó por la creación de empleos para enfrentar la pobreza.

Asimismo, el líder católico advirtió sobre lo que califica como “un invierno demográfico” por la baja natalidad que afecta a toda Europa que está envejeciendo.

El pontífice ha pedido políticas que apoyen a la familia al considerar que tener hijos est ambien una cuestión patriótica para sacar los paises adelante.

“En cuanto a la mujer trabajadora empieza a tener barriga, la echan. Y les dicen no puedes quedarte embarazada. Por fafor, esto es un problema para las mujeres trabajadoras” indicó el papa  a los empresarios italianos, con los que se reunió en el Vaticano.

Francisco ha lamentado así la baja natalidad en Europa, un hecho que ve “combinado” con el rápido envejecimiento de la población, lo que está agravando la situación de los empresarios, así como la de la economía en general.

“Es urgente apoyar a las familias y a la natalidad”, ha subrayado. Por ello, ha pedido facilidades para las familias que salir cuanto antes del “invierno demográfico” en el que vive Italia, y también otros países. “Es un mal invierno demográfico, que va en nuestra contra y nos impide poder crecer”, ha advertido.

Sin acceso a “ciertos tipos de estudio”

En otro discurso este mismo lunes a los miembros de la Sociedad de Estudiantes Suizos, el Papa ha vuelto a referirse a la mujer y ha denunciado que no tienen acceso a “ciertos tipos de estudios” o que su penetración quede limitada a “niveles inferiores”.

“¡No es algo que deba darse por sentado! Sabemos muy bien que hay muchas personas en el mundo que no tienen acceso a la educación. Y otras, especialmente mujeres, que tienen que limitarse solo a niveles inferiores o a ciertos tipos de estudios; y otras que se ven obligadas a recibir una educación forzada”, ha dicho.

Por otro lado, en su alocución ante la patronal italiana Confindustria, ha alertado de que la diferencia salarial entre el jefe y los empleados es “demasiado alta”. “Si la brecha entre los salarios más altos y los más bajos se hace demasiado grande, el empresariado se enferma, y pronto la sociedad se enferma”, ha defendido.

Aunque ha admitido que “hay jerarquía en las empresas” y es cierto que hay diferentes funciones y salarios, también ha abogado por qué los salarios no sean “demasiado diferentes”. “Hoy en día, la parte del valor que se destina al trabajo es demasiado pequeña, sobre todo si la comparamos con la que se destina a las rentas financieras y a los salarios de los altos directivos”, ha precisado.

Creación de empleo: Compartir la riqueza

En la audiencia con los empresarios de Italia, Francisco ha destacado que la creación de empleo es una forma de compartir la riqueza y, por tanto, es “otro nombre para la pobreza evangélica”.

El Papa ha recordado que la pandemia ha puesto a prueba muchas actividades productivas y ha dejado “herido” todo el sistema económico. Además, ha resaltado la guerra de Ucrania y la consiguiente crisis energética. “En estas crisis también sufre el buen empresario que tiene la responsabilidad de la empresa, de los puestos de trabajo, y que siente las incertidumbres y los riesgos”, ha asegurado.

Para Francisco hay dos tipos de empresarios en el mercado; hay empresarios “mercenarios” y empresarios que se parecen al “buen samaritano” porque sufren los mismos sufrimientos que sus trabajadores y “no huyen ante los numerosos lobos que les rodean”.

En su alocución, ha señalado que, si bien la riqueza ayuda mucho en la vida, también la complica porque puede convertirse “en un ídolo” y en un “amo despiadado”. “La riqueza –ha afirmado– también crea “envidias, murmuraciones, y no pocas veces violencia y maldad”.