Para Marranzini no hay déficit de energía, pero los apagones siguen
Los apagones atacan de nuevo, las facturas siguen elevándose al extremo de que hogares pobres y de clase media no pueden asumir su pago porque le alejaría la comida de la mesa, pero los funcionarios del sector eléctrico tienen nuevas excusas para justificar el descalabro del servicio.
Uno de ellos es el empresario Celso Marranzini, quien administra ahora la Central Punta Catalina.
Para este funcionario, en el país no hay déficit de energía eléctrica y la tanda de apagones los atribuye a mantenimientos de las plantas y el calor que sobrecalienta los transformadores por el alto consumo.
«Definitivamente ahí ocurren o suspensiones por calentamiento del transformador o avería por transformador, no porque la distribuidoras no están dando la energía» ha argumentado Marranzini.
Citó el caso de la unidad Punta Catalina Dos que en tuvo 43 días fuera del sistema por mantenimiento de largo plazo.
Agrega que esto se había anunciado con mucha anticipación, pero coincidió con un mantenimiento de la unidad número 2 de CEPM, lo que agravó la situación.
Dijo que en ese momento el sistema tenía 460 megavatios fuera por mantenimiento, y no hubo déficit de energía, «ahora las distribuidoras tienen que dar mantenimiento, eso es lo que la población olvida, si no se da no se puede dar un servicio eficiente».
Agregó que la compañía de transmisión tiene que dar también mantenimiento, o sea la gente tiene que meterse en la cabeza en general tiene que dar su mantenimiento, que lo busquen en los periódicos, que se anuncien adecuadamente, por ejemplo cuando nosotros vamos a dar mantenimiento empezamos a decirlo con mucho tiempo, porque en este país la única planta que se le da seguimiento es a Punta Catalina, uno tiene que cuidarse un poquito más, las otras pueden entrar en mantenimiento y nadie se acuerda» se quejó Marranzini.
Y aunque fue un funcionario importante del sector eléctrico en el gobierno del PLD, Marranzini dijo que hay que recordar que este gobierno tomó una decisión en agosto de dar un 100 por ciento de electricidad y que antes apenas se daban el 84 %, «indudablemente eso genera una presión en el sistema, sobre todo en tiempo de calor».