Policía comienza a “monitorear” las redes sociales
Buscarían evitar divulguen excesos y asaltos
Por Jeannette Kranwinkel.
La Policía Nacional, que no ha podido detener la ola delictiva que sufren los ciudadanos en las calles, ha comenzado una labor de espionaje a los usuarios de las redes sociales, no se sabe con qué fines.
La propia jefatura de la institución ha dado a conocer lo que califica como “un monitoreo constante a las diferentes plataformas de las redes sociales”.
El director de la policía, mayor general Eduardo Alberto Then ha encabezado la actividad, junto con el Comisionado Ejecutivo para la Reforma y Transformación de la Policía Nacional, el español José Vila del Castillo.
Habrá un general encargado de vigilar las redes sociales de los ciudadanos, Paúl Cordero Montes de Oca, director de Inteligencia Delictiva, el DINTEL.
Para tales fines se ha creado la División de Análisis de las Redes Sociales, que según explica la propia policía, tiene como misión, el “monitoreo constante” de las plataformas de redes sociales en el país.
Para algunos ciudadanos consultados, este mecanismo que ha comenzado a implementar la policía se podría prestar para amedrentar a la población y evitar que suban a las redes sociales los crímenes y asaltos que se cometen a diario en el país.
También podría limitar el derecho de ciudadanos a expresarse sobre temas relacionados con la policía y la seguridad ciudadana, por temor a represalias.
El “monitoreo constante” de las redes sociales de los ciudadanos, contrasta con la ausencia de agentes policiales en labores de patrulla en las calles, lo que está generando los hechos delictivos que son divulgados a través de las plataformas digitales.
Precisamente muchos hechos ocultados por la Policía, como la muerte de jóvenes como David de los Santos, tras ser golpeado en el cuartel del Ensanche Naco, se han conocido en el país por las denuncias a través de las redes sociales.
También asaltos espectaculares como el ocurrido en una envasadora de gas en Los Mameyes, se conocieron primero por las redes porque las autoridades policiales lo mantenían en silencio.