Policía mató mujer, no permitió auxiliarla ni recibió querella familiares

En medio del proceso de «reforma» la policía dominicana sigue caracterizándose por los excesos.

La muerte de civiles en manos de los agentes son una constante que parecen no preocupar a los promotores de la reforma de la Policía Nacional.

Malas actuaciones fruto de las debilidades del entrenamiento, también están provocando muertes de ciudadanos.

El caso más reciente, el de una mujer en Los Guaricanos: Luisa Yanderi Acevedo, con apenas 34 años fue alcanzada por disparos por la espalda disparados por agentes el pasado sábado.

Su madre, Sabina Cordero, clama por justicia y deplora el accionar de la policía que no ha cambiado su cultura de «disparar y luego averiguar».

Afirma que su hija había salido en compañía de su nieto y su hija de 15 años para recoger un abanico que había mandado a reparar. Mientras esperaba en el lugar, porque el abanico aún no estaba listo, se desató un tiroteo cuando una patrulla policial llegó disparando hacia un grupo de jóvenes que jugaban con pistolas de bolitas. En medio del caos, un disparo alcanzó a Luisa Yandery por la espalda.

Sabina Cordero, madre de la joven muerta por una patrulla policial en Los Guaricanos.
«Ella quiso resguardarse y entró al almacén de un mini market, pero cayó herida dentro del local. Los agentes policiales cerraron la puerta de metal del almacén y no dejaron que nadie se acercara para auxiliarla» se queja la señora Sabina Cordero.

Su hija de 15 años corrió desesperada hacia la estación de bomberos cercana en busca de una ambulancia, pero no encontró ayuda. Mientras tanto, según Cordero, los curiosos presentes se limitaban a grabar la escena sin intervenir o llamar al Sistema de Emergencias 9-1-1.

El relato se torna aún más dramático cuando menciona que una hermana de Luisa y una amiga, ambas enfermeras, intentaron entrar al almacén donde estaba herida para asistirla, pero los agentes lo impidieron.

Ellos se acordonaron alrededor del lugar como si ella fuera una delincuente, mientras mi hija se desangraba», expresó entre lágrimas.

Además, denunció que los agentes usaron gas pimienta para dispersar a los familiares que buscaban ayudarla.

La Policía alega que Luisa Yandery portaba un arma de fuego, dijo Sabina y rechaza categóricamente la versión.

Luisa Yandery fue trasladada al Hospital Ney Arias Lora en una ambulancia gestionada por la Policía, pero, según la madre, los agentes no permitieron que ningún familiar la acompañara.

«Después de dispararle y saber que estaba herida, no hicieron nada para salvar su vida. Cerraron la puerta del almacén y le negaron auxilio. Eso es un abuso policial», lamentó Cordero.

Sabina también denunció que los agentes detuvieron al técnico que reparaba el abanico, conocido en la zona como Frank «El Varón».

«No siento odio hacia quien haya hecho esto, pero tengo una hija muerta que no andaba en tráfico, robo ni contrabando. La Policía debe ser más cuidadosa antes de disparar en vía pública. Mi llamado es que se haga justicia. Sé que Dios la hará, aunque el hombre no lo haga», concluyó.

La familia de la víctima clama por respuestas y espera que este lamentable hecho no quede impune.

Mientras que José Luis Acevedo, padre de la víctima, expresó su frustración al intentar querellarse en el Departamento de Captura de Prófugos, donde asegura que no le aceptaron la denuncia.

«Esto fue un error de la Policía y, como siempre, se tapan entre ellos. Aquí nadie quiere pagar por un muerto», manifestó.

Denunció que los agentes recogieron el cuerpo de su hija sin la presencia de un médico legista y lo trasladaron al hospital Ney Arias Lora, incumpliendo los procedimientos legales.

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