Potencias del G20 terminan su cumbre en La India

Los países del G20 evitaron criticar a Rusia por invadir Ucrania y adoptaron un consenso de mínimos sobre el cambio climático, que no incluye la eliminación del recurso a los combustibles fósiles.
Al final del primero de dos días de su cumbre en Nueva Delhi, los países del G20 encontraron un lenguaje de consenso mínimo que fuera aceptable tanto para Rusia como para los países que apoyan a Ucrania en la guerra iniciada hace más de un año y medio.

En materia climática, el acuerdo es tan básico que fue aceptado por los países que defienden la eliminación gradual de los combustibles fósiles y los grandes productores de petróleo como Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Rusia.
Las divisiones en el bloque de las 20 grandes economías del mundo amenazaba con cerrar la cumbre de sábado y domingo sin una declaración final, pero el anfitrión India presionó para que se acordara una.
Sobre el conflicto en Ucrania, el grupo denunció el uso de la fuerza para lograr ganancias territoriales, pero evitó criticar directamente a Rusia por su invasión lanzada en febrero de 2022.
Aunque Estados Unidos y la Unión Europea (UE) intentaron evitar una declaración aguada sobre Ucrania, un alto cargo de la Casa Blanca dijo estar satisfecho con el resultado.
«Desde nuestra perspectiva hace un muy buen trabajo», comentó sobre la declaración el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan.
Señaló que el G20 defiende «el principio de que los Estados no pueden usar la fuerza para buscar conquistas territoriales o violar la integridad, soberanía territorial o independencia política de otros estados».
En cambio, el ministerio de Relaciones Exteriores ucraniano criticó la declaración final: «En lo que respecta a la agresión de Rusia contra Ucrania, el Grupo de los 20 no tiene nada de lo que enorgullecerse», declaró el portavoz del ministerio.
En materia climática, el G20 también logró encontrar un mínimo común denominador al evitar un compromiso para la eliminación gradual de los combustibles fósiles.
La eliminación de esa energía contaminante fue considerada «indispensable» el viernes por la ONU para alcanzar la meta de cero emisiones netas.
El grupo se comprometió eso sí a triplicar las fuentes de energías renovables para 2030, y a «eliminar gradualmente» el carbón «acorde con las circunstancias nacionales».
Los países del G20 representan cerca del 85% de las emisiones de gases de efecto invernadero, causantes del calentamiento global, y el observatorio europeo Copernicus advirtió esta semana que este año se perfila como el más caluroso de la historia.
En un giro para posicionarse como un interlocutor del Sur Global, el primer ministro indio, Narendra Modi, formalizó en la sesión del sábado la incorporación de la Unión Africana (UA) como miembro permanente del G20.
«Con la aprobación de todos, pido al jefe de la UA que tome asiento como miembro permanente del G20», dijo Modi antes de abrazar al presidente de Comoras, Azali Assoumani, que encabeza el bloque africano de 55 países.
El G20 nació en medio de la crisis financiera de 2008 como un mecanismo para estabilizar la economía mundial. Pero con los años, ha demostrado sus límites para alcanzar consensos entre socios disímiles.
Las diferencias entre los países miembros se hicieron evidentes desde antes de esta cumbre cuando el presidente chino, Xi Jinping, declinó asistir sin dar una explicación oficial, aunque los analistas apuntan como motivo las históricas disputas fronterizas entre su país e India.
El mandatario ruso, Vladimir Putin, tampoco acudió y fue representado por su ministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov.