Se complica situación actor Luis Lorenzo y mujer
Acusados envenenar a una tía
El actor Luis Lorenzo y su mujer, Arantxa Palomino, guardaban 140 mil euros en metálico en su piso de Rivas, la mayor parte en su dormitorio. Esa es la astronómica cantidad que encontró la Guardia Civil durante el registro llevado a cabo la semana pasada cuando se detuvo a la pareja, según ha podido confirmar ABC. Los investigadores sostienen que ambos son autores de la muerte de María Isabel Suárez, la tía de ella y que el móvil es económico, de ahí la importancia de ese hallazgo que sorprendió a los agentes.
La finalidad de ese registro no era buscar dinero, sino la presencia de cadmio y manganeso en cualquier tipo de recipiente, los dos metales pesados encontrados en la autopsia del cuerpo de Isabel.
Los análisis toxicológicos han revelado una presencia que apunta directamente al envenamiento: 200 veces por encima de lo normal en el caso del cadmio y veinte veces superior a lo habitual en cuanto al manganeso. Esos dos metales pesados, presentes en tintes, pilas y fungicidas y también de forma ambiental en zonas industrializadas, no habrían podido llegar de forma accidental al organismo de la mujer, según la autopsia.
Las acumulaciones de cadmio en el hígado, sobre todo, de manera general tienen afectación neuronal. La pareja aseguró al médico que certificó la muerte natural en primera instancia de Isabel que la mujer sufría demencia y tenía problemas cognitivos, un argumento que trata de desmontar la Guardia Civil. El Grupo de Homicidios recogió, como informó ABC, varios botes sin etiquetar del baño de la pareja que está analizando Criminalística.
Palomino y Lorenzo aseguraron que ellos estaban de camino a Asturias el 28 de junio del año pasado, cuando se produjo el fallecimiento de Isabel en el piso de Rivas, por lo que la víctima se habría quedado con la cuidadora que tenían. Los agentes están cotejando esa información porque al parecer fue el actor quien llamó al 112 para contar que la mujer había muerto, según informó ‘El Confidencial’. También habría indicado que sufría demencia senil en un estado avanzado y que estaba a punto de morir según un diagnóstico médico previo.
La Guardia Civil, en cambio, no tiene constancia de dicho diagnóstico pero sospecha que fue una maniobra para que el médico certificara una muerte natural a consecuencia de esa enfermedad.
La investigación patrimonial está aún en una fase preliminar, pero durante el registro llevado a cabo el miércoles pasado en el piso de la pareja en Rivas (Madrid) los agentes encontraron los 140.000 euros. Una cifra que no se corresponde con ingresos de los investigados. Según las primeras pesquisas, María Isabel Suárez disponía de unos 60.000 euros en sus cuentas, y de ellos se habrían sacado alrededor de 30.000 aunque la cifra no se ha precisado por completo. Los sospechosos ya han alegado que pagaban a una persona para el cuidado de la anciana las 24 horas y aseguran que pueden demostrarlo.