Se inician las redadas masivas contra haitianos ilegales en RD

Unidades militares están en las calles desde la madrugada de este viernes en radadas contra inmigrantes haitianos irregulares, en el inicio de la orden presidencial para que sean repatriados diez mil de esos extranjeros semanalmente, lo que ha planteado una serie de interrogantes sobre la forma en que se realizará ese proceso en cuanto a la logística y sin violación a los derechos humanos.

La Dirección General de Migración (DGM) informó que al y como se acordó este miércoles en el Consejo de Defensa y Seguridad Nacional que encabezó el presidente Luis Abinader, sus agentes están en las calles.

El Vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester (ARD), reitero que todo de realiza con respeto a los derechos, con prudencia y con uso proporcional de la fuerza como planteo el presidente Abinader en el Consejo de Defensa y Seguridad Nacional.

Explicó que realizan otros ajustes a gran escala, estrategia, inteligencia así como logística, capacidades, protocolo de detención y vehículos. A partir de este viernes se integraron las demás instituciones que interactúan con la institución.

Las jornadas de detención de extranjeros irregulares se realizan con la colaboración de las Fuerzas Armadas, el Ejército Nacional, la Fuerza Aérea de República Dominicana, la Fuerza de Tarea Ciudad Tranquila (CIUTRAN), la Policía Nacional y el Ministerio Público en distintos barrios y sectores del Distrito Nacional, la provincia Santo Domingo, Santiago y La Altagracia.

Lee Ballester precisó que esas acciones serán efectivas y se llevarán a cabo de acuerdo a lo que establece la ley general de Migración 285 – 04, el decreto de aplicación 631 – 11 y con respeto a los derechos humanos.

Agregó que cuando sean llevados a los centros de interdicción serán depurados y quienes no tengan un proceso migratorio abierto en la DGM serán deportados a su país. Este operativo busca reducir el exceso de población migrante que se percibe en las comunidades dominicanas y se llevará a cabo bajo estrictos protocolos que aseguren el respeto a los derechos humanos y la dignidad de los repatriados.

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