Secuestros en Haití llegan hasta funcionarios del Palacio Nacional
Canadá sigue haciendo negocios con la crisis
Por Williams Tell B.
El gobierno haitiano no ha logrado reducir los secuestros que son utilizados por las bandas para nutrir sus finanzas y comprar armas. Su nueva víctima es un funcionario del Palacio Nacional en Puerto Príncipe.
El Jefe de Protocolo de Palacio Nacional, embajador Yves Mazile fue secuestrado ayer domingo en la zona de Delmas 31 al igual que su chofe.
Fuentes de la casa de gobierno han confirmado la información que se produce horas después de que se anunciara la creación de una fuerza élite en la Policía de Haití para combatir a los grupos delictivos que tienen el control en gran parte del territorio.
Recientemente también fue secuestrado el político, exsenador de la República, en los últimos años, el doctor Louis Gérald Gilles. Es definido como un profesional que ha dedicado mucho tiempo a su práctica médica tanto en el sector público como privada ubicada en Delmas.
“Es un hombre sensible que puede pasar un día consultando a sus pacientes sin preocuparse por el dinero. Para él es un deber seguir ejerciendo la medicina para poder ayudar a los más pobres”, dice un miembro de su familia.
Mientras que Canadá sigue liderando la cooperación para reestablecer la seguridad en Haití, suministrando equipos para fortalecer el trabajo policial.
Otros tres vehículos blindados fabricados en Canadá, encargados y pagados por el gobierno haitiano desde junio de 2022, fueron entregados este domingo 19 de febrero a la Policía Nacional de Haití.
La Real Fuerza Aérea Canadiense ayudó en el transporte de estos materiales. Fue el embajador de Canadá en Port-au-Prince, Sébastien Carrière, quien hizo el anuncio. “Como anunció el jueves el Primer Ministro de Canadá, @ARC_RCAF entrega hoy tres vehículos protegidos contra emboscadas resistentes a las minas.
La semana pasada, los Jefes de Estado y de Gobierno de CARICOM analizaron la situación de seguridad en Haití y sus diversas crisis estuvieron en el centro de las discusiones. Al final de la reunión, los participantes adoptaron una declaración conjunta. Estos últimos consideran que la organización debe jugar un papel protagónico ante el deterioro de la situación en Haití, Estado miembro de la Comunidad, con el que existen obligaciones morales y políticas.