A 20 años de la muerte del ex presidente Joaquín Balaguer
Se cumplen este jueves 20 años de la muerte del líder reformista, el ex presidente Joaquín Balaguer, quien por espacio de 22 años gobernó el país divididos en períodos sombríos por la violación de los derechos humanos y de desarrollo en materia de infraestructuras.
Balaguer dejó este mundo a los 95 años con toda su vigencia política a pesar de que ya no estaba en el gobierno y su partido comenzaba un proceso que lo ha disminuido notablemente.
Fue un cortesano en la Era de Trujillo que llegó a ocupar la Presidencia de la República como parte de los títeres escogidos por el dictador para aparentar un gobierno democrático.
Durante la Era de Trujillo (1930-1961), se desempeñó como secretario de la embajada dominicana en Madrid (1932-1935); subsecretario de la Presidencia (1936); subsecretario de Relaciones Exteriores (1937); Embajador Extraordinario en Colombia y Ecuador (1940-43 y 1943-47 ); Embajador en México (1947-1949); secretario de Educación (1949-1955); secretario de Estado de Relaciones Exteriores (1955-57), y finalmente, “Presidente Títere” (1960-1961).
En su obra: “Memorias de un Cortesano en la Era de Trujillo”, Balaguer detalló que el tirano disfrutaba humillando e insultando a sus “sirvientes” y empleados del régimen de la peor manera. No obstante, él destacó que nunca sufrió ningún tipo de atropello por parte del dictador. Por el contrario, siempre estuvo cerca del poder desde el inicio de la férrea dictadura.
El primer gobierno de Balaguer llegó en 1960, cuando tomó la Presidencia en sustitución de Héctor Bienvenido, hermano de Rafael Leónidas Trujillo, luego de que la Organización de Estados Americanos (OEA) convenciera al dictador de que no era apropiado tener a un miembro de su familia como presidente.
En el 1966 inició los doce años de gobierno que terminaron en el 1978 cuando fue derrotado por Antonio Guzmán del Partido Revolucionario Dominicano, en un proceso en el que los militares salieron a las calles a intimidar con símbolos reformistas en las puntas de sus fusiles.
En los 12 años se cometieron una serie de asesinatos, al vivirse en el país una situación característica de un país que había salido de una guerra fratricida. Las luces de esa época fueron las grandes construcciones de presas, carreteras, avenidas, edificios públicos, parques como el Mirador Sur y el Mirador Norte y otras importantes infraestructuras.
Volvió al poder luego de ocho años de gobiernos del PRD para gobernar por una década en el que se hizo acompañar de caras nuevas, destacándose por una serie de reformas que apuntalaron la economía del país que dejó maltrecha la administración de Salvador Jorge Blanco en cuya gestión se registró una sangrienta poblada por el alto costo de la vida y las medidas recomendadas por el Fondo Monetario Internacional.
Balaguer contribuyó al triunfo del Partido de la Liberación Dominicana, de su archirrival Juan Bosch, ascendiendo a la presidencia el doctor Leonel Fernández, pero luego le sacó la alfombra al PLD y facilitó el triunfo de Hipólito Mejía y el PRD, cuando en el 2000 “amarró su chiva” en la Máximo Gómez 25, residencia del extinto líder.
Murió aquejado de problemas de salud propios de su avanzada edad, pero con una lucidez mental que aprovecharon hasta el último momento seguidores y opositores para buscar algún consejo de la experiencia acumulada por Balaguer uno de los políticos que por más tiempo ha ocupado el Palacio Nacional.