En Argentina no se duerme por su Copa en el Mundial

Luego de sufrir lo indecible hasta el último momento, los argentinos dieron rienda suelta a una alegría desbordante este domingo, con el triunfo de su selección nacional ante la de Francia por penales en la final de la Copa del Mundo en Catar.

Por fin, Argentina se alzó con el tercer título de su historia en la Copa del Mundo, luego de imponerse 4-2 en la tanda. La coronación anterior se remontaba a 1986, en México.

Millones de argentinos lloraron, gritaron y se fundieron en interminables abrazos en sus casas, en bares y en plazas de decenas de ciudades en las que se congregaron para ver la final de infarto en grandes pantallas, sintiendo que tocaban el cielo con las manos en algunos momentos o que todas las ilusiones se derrumbaban en otros.

EL OBELISCO, CENTRO DE LA CELEBRACIÓN EN BUENOS AIRES

En la plaza donde se encuentra el Obelisco, la canción volvió a escucharse, lo mismo que el nombre de Messi, el capitán de la selección argentina, quien marcó un tanto en el tiempo regular, uno en la prórroga y un penal en la tanda.

Familias integradas por padres que llevaban a sus hijos en hombros y portaban la bandera argentina celebraron hasta el cansancio. Ancianos, algunos trasladados en sillas de ruedas, también se sumaron al festejo en el que los participantes tocaron cornetas y tambores.

Las calles de otras ciudades argentinas se colmaron de personas. Muchas armaban círculos para celebrar, otras se trasladaban en autos adornados con la bandera argentina mientras tocaban la bocina para celebrar el triunfo. De los balcones de las casas también colgaban banderas del país.

La expectación para el encuentro de este domingo era incluso mayor que en el certamen de hace ocho años en Brasil, cuando llegó la derrota ante Alemania en tiempo extra.

La elogiada actuación de la selección a lo largo del Mundial de Catar unió a la población con una alegría poco común en un país afectado desde hace años por una de las peores tasas de inflación del mundo y por una creciente pobreza.

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