Sigue el trajinar de Jochi Gómez desde fiscalía DN a la Procuraduría

Fue trasladado nuevamente, por tercera vez, a la sede de la Procuraduría General de la República, el empresario Jochy Gómez Canaán, como parte de los interrogatorios de la investigación que se ha denominado Operación Calamar.

Así lo informaron sus abogados Carlos Olivares y Carlos Balcácer.

Consideraron muy normal este procedimiento que corresponde a una «fase secreta» de verificación de la investigación que le hace el Ministerio Público por el caso de los semáforos, dijo Olivares a la salida, tras más de dos horas de preguntas.

Mientras ellos hablaban, Gómez fue sacado por el sótano del edificio de la Procuraduría General, ubicado en el Centro de los Héroes, y conducido a la cárcel de la Fiscalía del Distrito Nacional, donde permanecerá junto a Hugo Beras, exdirector del Intrant (Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre), y otros cinco procesados.

Desde su detención, la noche del miércoles, Gómez, propietario de Transcore Latam, empresa que firmó un contrato supuestamente fraudulento con el Intrant y se orquestó el supuesto sabotaje a la red semafórica de la capital, se encuentra en buenas condiciones y las autoridades les han dado un trato afable, dijo Olivares.

Cuando terminen las preguntas, se espera que el Ministerio Público deposite la solicitud de medida de coerción en la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional. La fecha límite sería próximo a las 9 de la noche del viernes, 48 horas después de haber sido apresado.

De su lado, Carlos Balcácer reiteró que no hay pruebas que de Gómez haya ordenado la intervención a los semáforos de la capital. «Él tiene una tesis que lo alejan de responsabilidad de ese tipo de imputación», manifestó.